Cómo puede ayudarte el Feng Shui a gestionar el cambio
¿Hay algo que te hace sentir mal?
¿Te gustaría cambiar una situación que te estresa, pero no sabes por dónde empezar?
¿Estás cansada de vivir siempre la misma rutina?
¿Te apetecen hacer otras cosas que te hagan vibrar, pero no encuentras el momento o la manera?
El cambio y la motivación para cambiar tienen caras muy distintas para cada persona.
Algunos están cansados de estar siempre en el mismo lugar, pero no encuentran el camino.
Otros sueñan con todo lo contrario: un hogar cálido, entrañable, un lugar al que llegar cada día y sentirse arropados, en casa.
Y otros se encuentran más o menos a gusto en su hogar, y creen que con unas pequeñas modificaciones se sentirían muchísimo mejor. Sin embargo, la economía no da para grandes cambios y se impone la misma rutina de siempre.
Todos soñamos con estar mejor, pero si no pasamos a la acción nunca cambiará nada.
Eso, precisamente, es lo que le sucedió a uno de mis clientes.
Llevaba años observando las carencias de su casa.
No se sentía plenamente a gusto.
Pero, como se pasaba todo el día fuera de casa trabajando, no veía la necesidad de hacer nada.
Llegaba por la noche y se iba temprano por la mañana.
Hasta que, por motivos ajenos a su voluntad, su rutina laboral se detuvo.
De repente, se vio obligada a permanecer recluida en casa.
Ahora, todos aquellos detalles que nunca le habían gustado de su hogar se magnificaban.
Cada día se veía forzada a vivir con los aspectos de su hogar que tan poco le agradaban.
Cada vez se sentía más molesta y frustrada.
Hacía años que vivía en esa casa, ella había evolucionado y el espacio ya no reflejaba su esencia.
¿Qué hizo?
Encontró el coraje para cambiar.
Aprovechó el tiempo en su hogar para transformarlo, empezando por ¡el obsoleto color de las paredes!
Me pidió consejo para encontrar el color adecuado para el salón.
¡Quedó encantada!
Sentía que reflejaba lo que le gustaba, le hacía sentir suya la casa.
Pintó el recibidor y su habitación.
Quitó los cuadros anticuados repartidos por toda su casa.
Cambió los viejos enchufes.
Pero, entonces, llegó a su dormitorio.
En este espacio quiso seguir con la misma gama que en el salón.
Sin embargo, habíamos determinado que esa paleta de colores no era la más adecuado según el análisis de Feng Shui hecho.
¿Qué sucedió?
Sucedió que pintó con colores no recomendados por mí y le resultaba imposible dormir bien.
Y no solo eso: le empezaron a ocurrir cosas desagradables, sobre todo relacionadas con pérdidas importantes de dinero.
Sentía que había algo desequilibrado en su vida.
Sin pensárselo, me contactó y le ayudé a elegir un tono adecuado para que su descanso fuera favorable.
Tal vez te cueste creerlo, pero desde que hicimos esos pequeños cambios según su análisis de Feng Shui, ella descansa como un bebé.
Las pérdidas de dinero se han suavizado.
“No puedo creer cómo con tan solo cambiar los colores de la habitación, se ha producido un cambio tan radical”, me comentó sorprendida, “¡se ha revolucionado la casa!”.
Y sí, efectivamente.
Con el Feng Shui la casa se revoluciona, pero para bien.
Porque, como bien dice el dicho: “Si quieres hacer cambios en tu vida, cambia 27 cosas en tu casa”.
¡O puedes empezar por ponerte en contacto conmigo!
Juntas, podemos gestionar y enfocar los cambios que sabes que necesitas y ¡podrían revolucionar tu vida para mucho mejor!
¡Escríbeme aquí!
¡Te espero!